Dermatitis en las Axilas: Causas y Tratamientos Efectivos

La irritación de axilas es un problema más común de lo que nos pensamos. Sentir picazón en las axilas suele ser un problema muy frecuente que puede estar provocado por una gran variedad de causas diferentes. Es cierto que las axilas son una de las zonas más sensibles y delicadas del cuerpo y se encuentran expuestas a cualquier molestia. La picazón en las axilas y la irritación de la piel de las mismas es bastante frecuente a la vez que molesto. Estas causas suelen ocasionar no solo la comezón, sino también el enrojecimiento de la zona, descamación y ardor.

Al tratarse de una zona especialmente sensible, fina y que recibe menos luz solar, las axilas están más expuestas a agresiones externas como la depilación o fricción de la ropa. Así mismo, el exceso de sudoración es otro de los principales causantes de la aparición de posibles irritaciones y picores en las axilas.

Causas Comunes de la Dermatitis en las Axilas

Los motivos del picor en las axilas suelen ser diversos y estar relacionados por algún tipo de trastorno en el cuerpo. Algunos tratamientos médicos pueden ser la causa principal de este tipo de molestia, pero si no se está tomando ningún tipo de medicación y el problema persiste, puede estar provocado por otros motivos.

El afeitado puede causar irritación en las axilas.

• Productos cosméticos: Algunos componentes de ciertos productos cosméticos pueden provocar en las axilas prurito. Muchos productos contienen alcohol, fragancias o sales de aluminio que pueden provocar reacciones en la piel sensible. Algunos perfumes, detergentes o suavizantes pueden provocar una reacción alérgica localizada.
• Mala higiene: Si no se mantiene una higiene adecuada de forma diaria en la zona de las axilas, puede generar la proliferación de bacterias siendo las responsables de la irritación y malos olores. La piel de las axilas, igual que la del resto de nuestro cuerpo, necesita respirar, transpirar e hidratarse, ya que como el resto de la dermis produce residuos y pieles muertas.
• Afeitado y depilación: La utilización continuada de maquinillas de afeitar puede herir gravemente la piel, por ello, es recomendable cambiar cada pocos usos de maquinilla, intentando elegir aquellas con bandas hidratantes. Usar cuchillas en seco, cera caliente sin cuidado o no hidratar la zona después de depilar puede dañar la barrera cutánea.
• Sudoración excesiva: El sudor constante crea un entorno húmedo que favorece la irritación y la proliferación de bacterias o levaduras.
• Tejidos sintéticos: Los tejidos como el poliéster, si están en contacto directo durante muchas horas, pueden aumentar la fricción y el calor.
• Infecciones por hongos: Al no secarse bien la zona de las axilas, la humedad puede provocar candidiasis. También puede provocar hongos el uso de ropa sintética. Recuerda que las axilas son una de las partes menos ventiladas del cuerpo y, en consecuencia, pueden acumular humedad que, a la larga, se traduce en hongos.
• Medicación: La toma de algunos medicamentos puede desestabilizar el pH de la piel y también el de las axilas.

Tipos de Dermatitis que Pueden Afectar las Axilas

El término dermatitis se refiere a diferentes tipos de inflamación de la piel. Dependiendo de qué tipo de dermatitis se trate, esta se puede manifestar de diferentes formas. La dermatitis es una afección de la piel que causa inflamación, enrojecimiento, picazón, descamación y sequedad.

• Dermatitis atópica: Este es el tipo más común de dermatitis. Los síntomas de la dermatitis atópica generalmente comienzan a aparecer en la infancia, aunque pueden afectar a personas de todas las edades. Esta enfermedad se caracteriza, principalmente, por provocar parches en la piel con enrojecimiento y picazón.
• Dermatitis seborreica: Este tipo de dermatitis afecta principalmente al cuero cabelludo, aunque también se puede extender a diferentes partes del rostro e incluso hasta el pecho. Sus principales síntomas son piel escamosa, caspa, enrojecimiento de la piel y picazón. En algunos casos, la dermatitis seborreica desaparece por su cuenta, sin tratamiento.
• Dermatitis por contacto: Este tipo de dermatitis es causada por el contacto directo con ciertas sustancias. Se clasifica en dos tipos: la dermatitis irritante por contacto, -la cual es causada por la exposición a una sustancia irritante para la piel como los detergentes fuertes, los ácidos, los solventes y los herbicidas,- y la dermatitis alérgica por contacto, la cual consiste en una reacción alérgica del sistema inmunitario de una persona.

Los síntomas de la dermatitis también pueden dar lugar a complicaciones. La picazón asociada con la dermatitis puede llegar a ser lo suficientemente severa como para provocar trastornos del sueño. Además, el rascarse las erupciones causadas por la dermatitis pueden causar llagas abiertas, las cuales podrían infectarse por bacterias, virus u hongos. En algunos casos, estas infecciones de la piel pueden extenderse.

Tratamientos y Remedios para Aliviar la Dermatitis en las Axilas

Estas causas del picor en las axilas suelen ser muy comunes y lo más aconsejable tras su aparición es aplicar algún tratamiento o remedio si no es muy intenso. Dependiendo del caso, es probable que necesites aplicar algún tipo de tratamiento natural o producto en forma de crema para solucionar el picor en las axilas. En el mercado hay una serie de soluciones muy eficaces para calmar la picazón en las axilas que ayudan a devolver la barrera natural e impedir la entrada de bacterias.

El aloe vera es un remedio natural para la piel irritada.

• Hábitos de higiene saludable: Es fundamental para no acumular suciedad ni otro tipo de bacterias. Usa limpiadores sin jabón, específicos para piel sensible. Evita esponjas duras o frotar demasiado.
• Aloe vera: Es una planta que sirve para mejorar y tratar diversos problemas de la piel.
• CeraVe crema hidratante: Ayuda con la hidratación que la dermis necesita recuperar. Puedes aplicarla por el cuerpo y axilas, ya que las ceramidas, ácido hialurónico y glicerina que contiene facilitan la creación de la barrera protectora sobre la piel.
• Bicarbonato de sodio: Lavar las axilas con bicarbonato facilita la retirada de cualquier hongo.
• Desodorantes sin alcohol: Para evitar el picor, irritación y escozor es recomendable evitar un desodorante con alcohol. Opta por cremas sin alcohol, sin fragancias y con ingredientes calmantes como aloe vera, pantenol o avena.
• Avena: Mezcla agua y avena hasta formar una pasta. Después aplica y deja actuar durante unos minutos para ayudar a reducir el picor.
• CeraVe loción hidratante: Es beneficiosa para reparar la piel que presenta irritación. La mezcla de sus componentes ayudan a hidratar y reparar por completo la piel del cuerpo y las axilas.
• Bepanthol® SensiCalm®: Es un producto sanitario cuya aplicación ayuda a hidratar la piel, a reparar la barrera cutánea y a aliviar el picor intenso relacionado con la dermatitis atópica (eczema atópico) en tan solo 30 minutos, gracias a su fórmula con pantenol. Además, Bepanthol® SensiCalm® no contiene corticoides, por lo que puede ser aplicado tantas veces como se crea necesario.

Recomendaciones Adicionales y Cuidados Preventivos

Para evitar la aparición de la picazón en las axilas es aconsejable seguir una serie de cuidados para que no aparezcan. Cuando aparezca un intenso picor en las axilas es necesario saber el motivo principal para aplicar la solución correcta.

• Si el picor apareció tras usar un desodorante nuevo, lo más sensato es dejar de aplicarlo unos días. Observa si la piel mejora.
• Espera a que la zona se recupere antes de volver a afeitar o aplicar cera. La utilización continuada de maquinillas de afeitar puede herir gravemente la piel, por ello, es recomendable cambiar cada pocos usos de maquinilla, intentando elegir aquellas con bandas hidratantes.
• Durante unos días, evita prendas ajustadas o de tejidos sintéticos. Cambiar de desodorante o de tipo de ropa que se utiliza puede ser de gran ayuda para combatir la irritación y la picazón.
• Mantener tu piel lo más sana posible. Las medidas de cuidado de la piel que puedes tomar incluyen tomar duchas más cortas (evitando el agua caliente), humectar tu piel, secarte con una toalla suave y evitar el rascado.
• Si tu dermatitis se debe a causas alérgicas, puedes tratarla con medicamentos antihistamínicos, los cuales pueden ayudar a mantener los síntomas bajo control.

Por otra parte, cuando el brote se ha calmado, es necesario prevenir la aparición de una nueva irritación siguiendo una serie de recomendaciones. Por ejemplo, utilizar un desodorante adecuado y según tu tipo de piel (en caso de ser sensible) es una gran alternativa. Es aconsejable escoger productos para las axilas con poca capacidad astringente o secante y que no ocasionen irritación. Además, es fundamental que no alteren la barrera cutánea y que sean respetuosos con el pH de la piel. Por otra parte, cuando la piel es sensible, lo mejor es utilizar productos formulados específicamente para este tipo de piel y que estén libres de sustancias irritantes.

Si el picor no mejora en una semana, si aparece descamación, ampollas, heridas o si la zona huele diferente a lo habitual, consulta con un profesional.

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