Tratamiento para Comedones Cerrados y Cuidado de la Piel con Tendencia al Acné

Si notas la aparición de microquistes o puntos negros (o ambos) en tu rostro al mismo tiempo, ¿qué debes hacer? El tratamiento del acné es una maratón, no un sprint.

El acné puede presentar distintas formas, precisando cada una de ellas tratamientos diferentes. En el acné ligero se caracteriza por la piel con brillos y pequeños granitos; suele darse en fases iniciales. En el acné retencional, el sebo se acumula y abre comedones (puntos negros) o cerrados (microquistes). En el acné inflamatorio, proliferan las bacterias con inflamación y aparecen los granos rojos purulentos. El acné nódulo-quístico se caracteriza por la dilatación e inflamación de las glándulas sebáceas, que forman nódulos que supuran. Según en la fase en la que se encuentre, es preciso recurrir a unos u otros tratamientos.

Durante las primeras semanas de tratamiento, en algunas pieles puede ocurrir una exageración de las lesiones acneicas, debido a que los productos cosméticos empiezan actuando en las capas más profundas de la epidermis. En pocas palabras: cuando empiezas el tratamiento, pueden aparecer granitos en zonas donde antes no tenías.

Identifica tu tipo de acné

En el anterior post sobre acné hablábamos sobre los tipos de lesiones acnéicas y sus características. Según necesidades, vamos a crear cinco rutinas para diferentes tipos de piel acnéica.

• Acné adolescente: Suele aparecer exceso de sebo en la zona T, es decir, en frente y zona nasal. Predominan los comedones y, en menor grado, las pústulas y pápulas.
• Acné adulto: Este tipo de acné suele aparecer en la zona inferior del rostro, sobre todo localizado en el mentón, y las lesiones suelen ser de carácter inflamatorio. Hay menos seborrea en la piel que en el acné adolescente.
• Acné en pieles sensibles: Este tipo de acné comparte características con acné adulto, pero prestando especial cuidado a no usar productos muy agresivos con la piel. La rutina contiene pocos productos para no cargar mucho la piel.
• Acné hormonal: Este acné tiene un gran componente hormonal, aparece sobre todo en el segundo trimestre y en la zona de la barbilla. Tenemos que prestar especial atención al uso de cosméticos que contengan ingredientes aptos durante el embarazo y a la aparición de manchas, propia de este estadio.
• Maskné: Este acné, que tanto ha dado que hablar durante los últimos años, se produce debido al roce de la mascarilla con la piel, además de producir un exceso de humedad en la zona de la boca debido al vapor y el sudor.

Rutina Diaria para el Cuidado de la Piel

Limpieza

El primer paso es elegir cuidadosamente los productos de higiene diaria. Para la limpieza, el agua micelar o un gel limpiador suave y sin jabón ayudarán a reducir el exceso de sebo y a matificar la piel sin dañarla. Una rutina que hay que adoptar por la mañana y por la noche, para una mayor eficacia.

Hidratación

El paso de la hidratación también es muy importante, incluso si tienes la piel grasa. De hecho, una piel poco hidratada reacciona produciendo más sebo. Elige una crema ligera, no grasa, matificante, antiimperfecciones y no comedogénica.

Exfoliación

Y no más de dos veces por semana, puedes aplicar una mascarilla exfoliante con propiedades limpiadoras y absorbentes.

Productos Recomendados

• La crema Acniben hidrata la piel a la vez que evita la aparición de imperfecciones.
• Las cápsulas de Sebovalis funcionan muy bien en pieles con exceso de grasa para minimizar su aparición.
• Añadir un sérum si la piel lo permite y siempre de manera progresiva, como L.R.P.
• La crema Avène Clean Ac hidrata la piel para compensar los efectos desecantes de los tratamientos anti-acné. Especialmente indicada para pieles jóvenes con problemas, la crema es untosa y no grasa,hidrata, nutre y recupera el bienestar y la flexibilidad necesarios. Agradable al tacto, untosa y no grasa. El producto incorpora una asociación de componentes naturales ( coco, manteca de karité y aceite de jojoba) que devuelven a la piel la nutrición y el bienestar disminuidos por los tratamientos desecantes. Hidrata sin aportar grasa, alivia la piel y respeta la sensibilidad natural. Limpiar la piel con Avène Clean-Ac Limpiador. A continuación, aplicar el producto.

¿Qué son los puntos negros?

Los puntos negros, también conocidos como «comedones abiertos», son pequeñas obstrucciones de sebo situadas bajo la piel. El poro está abierto y el extremo de la obstrucción se vuelve negro debido a la oxidación, por lo que se denomina «punto negro». Se trata de un tipo de acné no inflamatorio que puede aparecer a cualquier edad y suele ir acompañado de comedones cerrados (también conocidos como «puntos blancos»).

Los puntos negros no son dolorosos ni peligrosos: son sobre todo una preocupación estética porque aparecen principalmente en el rostro.

Punto negro o filamento sebáceo?

Ten cuidado de no confundir los puntos negros con los filamentos sebáceos. Aunque se parecen por su aspecto, son dos cosas completamente distintas:

• Un punto negro es un comedón, es decir, una lesión de acné. Es cuando un poro se obstruye y se llena de sebo e impurezas.
• Un filamento sebáceo es el canal que transporta el sebo a la piel para hidratarla. Su punta a veces se ennegrece cuando entra en contacto con el oxígeno. No se trata de una imperfección, sino de una función normal de la piel.

Para diferenciarlos, fíjate bien en tu piel: los puntos negros están en la superficie y tienen un color muy oscuro, mientras que los filamentos sebáceos están incrustados en más profundidad bajo la piel y suelen tener un aspecto más grisáceo.

¿Cómo deshacerse de los puntos negros?

Hoy en día, se promocionan en Internet muchos tratamientos milagrosos, especialmente en las redes sociales. Sin embargo, la mayoría no son muy eficaces e incluso pueden ser perjudiciales para la piel.

La única forma de tratar un punto negro es aplicar los cuidados adecuados y esperar a que la piel haga su trabajo. Los activos más eficaces contra los puntos negros son:

• Retinaldehído: como precursor del ácido retinoico, es uno de los mejores activos para eliminar los comedones. Solo se utilizan en los casos más graves.

¿Hay que eliminar los puntos negros?

Los puntos negros son relativamente fáciles de eliminar, y normalmente tenemos ganas de hacerlo. Sin embargo, es mejor evitar quitarse los puntos negros uno mismo, ya que se corre el riesgo de crear una inflamación en el poro, que luego puede cicatrizar mal. Aléjate también de las famosas mascarillas de carbón vegetal, que son muy agresivas para la piel y causan irritación, lo que provoca un aumento de la producción de sebo por parte de la epidermis. Si el punto negro te molesta y es necesario extirparlo, acude a tu dermatólogo para asegurarte de no sufrir efectos secundarios.

Cuidados diarios para evitar los puntos negros

Las dos causas principales del acné en el rostro son la sobreproducción de sebo y la presencia de bacterias. Si abordas estos dos problemas a diario, podrás evitar en gran medida la aparición de puntos negros.

• Limpieza: lávate el rostro dos veces al día con un producto purificante para eliminar el maquillaje, las impurezas y la acumulación de sebo que puede obstruir los poros.
• Hidratación: aplica una crema hidratante en el rostro directamente después de limpiar la piel. Cuando la piel está deshidratada, aumenta su producción de sebo, por lo que este es un paso muy importante para prevenir el acné. Si tienes la piel grasa, elige una crema matificante y antiimperfecciones.
• Exfoliación: Exfolia tu piel aproximadamente una vez a la semana para limpiarla en profundidad.

¡El barrillo es la punta del iceberg! Hay cuatro fases en la formación de un barrillo: la sobreproducción de sebo, el engrosamiento de la piel, la formación de puntos negros y comedones y, finalmente, la inflamación.

¿Qué desencadena el acné?

Las hormonas estimulan la secreción de sebo y hacen que la piel sea más grasa, especialmente cuando las enzimas de la piel hacen un mal uso de ellas (como en la pubertad y en épocas de estrés). La capa superior de la piel se engrosa debido al aumento de los ácidos grasos libres y se vuelve pegajosa. Los folículos pilosebáceos (sacos situados a nivel de la piel) se llenan de células y sebo que se vuelven negros al contacto con el aire: estos son los puntos negros.

Cuida tu alimentación

Si, existen alimentos que empeoran el acné, como el azúcar, los carbohidratos y las grasas refinadas.

Si tratas tu acné retencional con tratamientos dermatológicos, ten en cuenta que algunos de ellos pueden resecar la piel. Por el contrario, si tengo una piel gruesa, con exceso de sebo y comedones cerrados, sin duda optaré por rutinas con productos más concentrados en activos que eliminen de una vez por todas el exceso de sebo y el acné.

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