A menudo, los pacientes acuden a la clínica preocupados por los cambios que han notado en su piel tras haber padecido COVID-19. Cuando pensamos en los síntomas de la COVID-19, los asociamos rápidamente con tos, fiebre, dificultad para respirar…
En efecto, el nuevo coronavirus o SARS-Cov-2 causa una infección respiratoria muy contagiosa que puede llegar a desencadenar una afectación pulmonar grave, especialmente entre la población de riesgo. Sin embargo, con la COVID-19 también pueden sufrir alteraciones otros órganos de nuestro cuerpo como la piel.
Incluso sin pasar la enfermedad, las medidas para su prevención, como el uso de la mascarilla o del gel hidroalcohólico, pueden desencadenar irritación, sequedad, rojeces, problemas de transpiración… A esto, debemos sumar que la sexta ola ha comenzado en pleno invierno, con las temperaturas más bajas del año, momento en el que nuestra piel también se resiente debido al frío.
Más allá de síntomas comunes como la tos, el resfriado o el dolor de garganta, en ocasiones, el coronavirus puede provocar alteraciones cutáneas. En este artículo, desvelamos cómo afecta el COVID en tu piel, para que puedas detectar estos signos desde el primer momento.
Como decimos, al margen de las manifestaciones más comunes u otras más graves como la neumonía, los síntomas del COVID son muchos y, algunas veces, pasan desapercibidos. Es el caso de las afecciones en la piel que, si bien es cierto que la mayoría no son preocupantes y desaparecen sin necesidad de tratamiento, es bueno conocer cuáles son para poder tratarlas.
En este punto, podemos establecer dos bloques: afecciones en la piel causadas por el COVID y, por otra parte, los daños en la piel como consecuencia del uso diario de geles hidroalcohólicos, el uso continuo de mascarillas y, por supuesto, el estrés.
Inevitablemente, estas semanas de confinamiento por el COVID-19 pueden provocar estrés a muchas personas. Es normal. Por eso, si estamos bien y permanecemos en casa debemos concentrarnos en cuidarnos por dentro y también por fuera, ya que la ansiedad puede afectar directamente a nuestra piel, provocando, entre otros problemas, sequedad.
La constante desinfección, la falta de sol y de aire, el estrés o el ambiente cálido y seco provocado por la calefacción son circunstancias que pueden provocar sequedad en la piel. La cara es una de las zonas más expuestas y, por lo tanto, una de las zonas más afectadas por la sequedad.
Para combatir la piel seca de la cara es muy importante usar los productos adecuados, y no abusar de ellos. Para empezar, lávate la cara con un jabón apto para esta zona, que no sea abrasivo y que elimine la suciedad de manera efectiva.
A continuación, sécate la cara con una toalla, dando leves golpecitos, evitando frotar la piel para no resecarla más. Es fundamental escoger una crema hidratante adecuada para nuestro tipo de piel, ya que las pieles grasas, secas o normales, necesitan cuidados distintos, a pesar de que padezcan el mismo problema.
Para las pieles grasas es importante elegir una crema hidratante con una base de gel, ya que al ser más ligera, facilita su absorción. Para las pieles secas debería usarse una crema con una textura más cremosa, para aportarle un extra de hidratación.
Ahora que ya hemos escogido la crema, es importante aplicarla de la manera más efectiva. Aplícate un poco de crema en las yemas de los dedos y realiza un leve masaje circular, empezando por la parte inferior de la cara y subiendo hasta las sienes.
Masajéate la cara durante unos minutos hasta que tu piel absorba completamente la crema. Los tónicos faciales también pueden ser un aliado para combatir la piel seca de nuestro rostro, independientemente del tipo de piel que tengamos.
Las manos son la otra parte del cuerpo que está sufriendo más durante este encierro, ya que la desinfección constante las reseca muy rápidamente. La clave para combatir la piel seca es la constancia, así que es fundamental incluir estos cuidados en nuestra rutina y realizarlos de manera diaria.
Pero estas medidas de prevención también están afectando a nuestra barrera de la piel: lavarse las manos excesivamente, el uso mascarillas y guantes son factores externos que desgastan la barrera protectora de la piel y afectan a su sensibilidad.
La piel actúa como barrera contra las bacterias y virus. En este sentido, protegerse ante el Covid-19 es tan importante como cuidar la barrera cutánea de la piel.
Daños Comunes en la Piel por Uso de Mascarillas y Gel
Nos referimos, por tanto, a los síntomas que casi todos, en algún momento, padecemos por los materiales que debemos emplear para protegernos del virus.
Afecciones por el Uso de la Mascarilla
El exceso de humedad o el aumento de la temperatura en la zona facial son las causas más frecuentes que desencadenan problemas en la piel como rojeces, irritación, deshidratación, dermatitis, poros dilatados o acné. Por eso, es recomendable cambiarlas o lavarlas a menudo, en la medida en que sea posible, para evitar el exceso de grasa acumulada en la misma.
El uso que hacemos de las mascarillas puede ser crucial a la hora de evitar o minimizar problemas en la piel. Se ha demostrado que las deformaciones en la estructura de las mascarillas, provocadas por la manipulación inadecuada por parte de los usuarios o el sobreuso (a menudo la reutilización), reducen la porosidad del material, lo cual conduce a la alteración de los niveles de acumulación de oxígeno y de dióxido de carbono en el espacio que media entre la mascarilla protectora y la piel.
Usa limpiador un suave y productos sin jabón. Evita el uso de tónico facial, que puede resecar la piel, así como de productos con fragancia o cremas grasas. Hidrata bien la piel. Usa tu crema solar habitual como hidratante (es decir, no pongas crema solar seguida de hidratante); es importante proteger la piel contra la exposición solar incluso llevando mascarilla.
Hemos observado un aumento de casos entre mujeres jóvenes que acuden a nuestra consulta de dermatología por uso combinado de múltiples productos (serum faciales, aceites, cremas de día y de noche, exfoliantes faciales, etc.). Reduce la cantidad de productos diferentes.
Evita, en la medida de lo posible, los roces. Aplica crema hidratante un mínimo de 30 minutos antes de ponerte la mascarilla para reducir la fricción por rozaduras entre la cara y la mascarilla. Limita el tiempo de uso de la mascarilla.
Problemas en la Piel Causados por Gel Hidroalcohólico en las Manos
Como ya sabemos, estos geles contienen alcohol, por lo que, una de sus principales consecuencias es que resecan la piel de nuestras manos. Un uso excesivo de este producto puede generar dermatitis, especialmente en personas con la piel más seca. Te recomendamos, por tanto, utilizar una crema de manos acorde con tu tipo de piel para protegerte de estas afecciones.
Estrés o Fatiga Pandémica
Y es que, ¿quién no se ha sentido en algún momento saturado por la situación actual? Efectivamente, el estrés es uno de los motivos principales por los que nuestra piel sufre cambios y afecciones. Las más frecuentes son la aparición de psoriasis, eczemas y dermatitis.
Alteraciones en la Piel Causadas por COVID
En cuanto a manifestaciones cutáneas que se producen como consecuencia de pasar el virus, existen 5 más frecuentes:
- Sabañones o erupciones similares: Especialmente en manos y pies, en pacientes más jóvenes y en las etapas más tardías del COVID. Se trata de inflamaciones de color rojo o violáceo que provocan picor, dolor, quemazón y ampollas. Esto no quiere decir que siempre estén relacionado con el virus, pues también son frecuentes en los meses de frío.
- Erupciones vesiculosas: Recuerdan un poco a la varicela, al tratarse de erupciones cutáneas. Se detectan, sobre todo, en el tronco y son más habituales en pacientes de mediana edad. Suelen desaparecer a los diez días.
- Lesiones urticariformes: Más parecidas a la urticaria. Se manifiestan sobre todo en tronco, pero también en el resto del cuerpo y las palmas de las manos. Combina la aparición de habones o ronchas con la inflamación de la piel y las mucosas (angioedema). Producen un picor intenso y son más comunes, también, en pacientes de mediana edad con cuadros de gravedad intermedia/ alta.
- Erupciones generalizadas: O maculo-pápulas. Aparecen por el cuerpo de forma dispersa y son las más frecuentes de las lesiones cutáneas, en el 47% de los casos. Son parecidas a las provocadas por otras infecciones y también se producen en pacientes más graves y de mediana edad.
- Necrosis por obstrucción vascular: Estas se observan en personas de edad más avanzada y afectadas por cuadros de gravedad mayores. Se trata de unas marcas en la piel que, por su forma, recuerdan a una red. Son similares a las que vemos por una exposición continuada a una fuente de calor como un brasero. Solo se manifiestan en el 6% de los casos.
Un estudio realizado por el King’s College London reveló que un 21 % de las personas que han pasado la COVID-19 solo detectaron manifestaciones dermatológicas como síntomas de la enfermedad. De hecho, desde el inicio de la pandemia, se ha visto que las lesiones en la piel pueden servir como señal de alerta temprana del contagio. Así, entre los síntomas dermatológicos más típicos causados por la infección por nuevo coronavirus, caben destacar:
- Erupciones (con escozor o quemazón, irritación o sensación de tirantez)
- Urticaria (picor)
- Eccemas en el pecho y cuello
- Placas escamosas
- Lesiones vasculopáticas, como la aparición de petequias, que son pequeños puntos rojos que aparecen bajo la piel, o de los “dedos covid” (rojez e inflamación de los dedos de los pies, debido a la aparición de eritemas).
La deshidratación será también notable en la piel con síntomas, a menudo referida ya como “piel COVID-19”. Por tanto, se recomienda extremar la rutina de limpieza e hidratación de la piel. En caso de sequedad, es preferible apostar por cremas emolientes, varias veces al día y por la noche antes de acostarse.
¿Cómo Prevenir Problemas en la Piel?
La prevención se basará en la realización de un cuidado diario de la piel, en función de las características de cada caso, es decir, en función de si se tiene una piel normal, seca o mixta/grasa, dado que cada una tendrá unas necesidades específicas:
- Las pieles secas requerirán productos en cuya formulación se incluyan mayor proporción de activos hidratantes y calmantes.
- Las pieles grasas necesitarán cosméticos libres de grasa y con elevada capacidad de detergencia.
De una forma general, será adecuado llevar a cabo una limpieza diaria de la piel para eliminar restos de suciedad derivados de la polución ambiental, el sudor, el sebo, el acúmulo de bacterias, los restos de maquillaje… mediante el uso de un cosmético limpiador y se recomienda completar el tratamiento mediante la utilización de un tónico posterior.
El empleo del agua para la limpieza de la piel, aunque parezca paradójico, puede provocar intensa sequedad en la misma, al favorecer la evaporación del contenido acuoso presente en la capa córnea (capa más superficial) cutánea.
Además de las medidas de prevención, no olvides la función de la piel como barrera de defensa ante las agresiones externas.
Tratamientos Profesionales para la Piel Afectada por COVID-19
Si sientes que tu piel está irritada, tiene imperfecciones o le falta luminosidad, puedes plantearte la aplicación de una crema regeneradora, como la crema dermocosmética Martiderm, que debe utilizarse por la noche en cara, cuello y escote, realizando un suave masaje hasta su completa absorción.
Durante el día, no olvides hacer siempre uso de la crema solar, incluso en invierno, ya que la fotoprotección es necesaria durante todo el año. Recuerda que el sol, aunque solo salga durante unas horas, es una de las principales causas de irritación de la piel.
Para tratar de hacer frente a estas posibles complicaciones, vamos a darte algunos consejos para cuidar la piel en tiempos de COVID-19.
Aquí tienes algunos tratamientos que te pueden ayudar a mejorar la salud de tu piel:
- Dermalinfusión: Un tratamiento que revitaliza la piel.
- Infiltración de vitaminas: Administración de vitaminas en la dermis, a menudo con ácido hialurónico y aminoácidos.
- Peeling químico: Regeneración de la piel mediante la aplicación controlada de ácidos.
- Symmed facial: Estimulación de colágeno y elastina con radiofrecuencia para prevenir arrugas y flacidez.
- Exfoliación: Purificación y brillo natural con exfoliantes suaves.
- Crema reafirmante: Utilizar cremas como la C+C de Natura Bissé.
- Vitamina C en el contorno de los ojos: Revitalización con ingredientes energizantes y antioxidantes.
Estos consejos ayudan a mejorar las consecuencias que el coronavirus puede causar en tu piel.